domingo, noviembre 15, 2009

Al final de mis veinte. Parte V

Entre las varias más historias que se pudieran contar pero que no haré por sobriedad de tiempo y espacio pasaron los meses. Enero fue un mes muy malo para el Le bisné, pero era la cuesta de enero y no había por qué desanimarse. Luego vino febrero que estuvo malo también. Luego vino el principio de marzo y luego las vacaciones de Semanasanta que estuvieron peor, horribles, habrá entrado apenas como un cinco por ciento de lo que debía. Luego vino ya el desastre económico culminado con la alarma roja de la influenza. Tremendo todo esto, pero en mayo y junio comenzó a levantarse el sol sobre nuestro paisaje, apenitas. Y luego, retecataplum, sucedió otro evento trágico, el asalto a mano armada.
Pero antes de contar a detalle el último evento trágico, regresaré a enero. En enero tomé varios exámenes de la escuelita, como le decía, a la UACM, de una serie de materias que arrastraba desde el ciclo básico. Eso y dos materias, prácticamente certificadas de ciclo superior, y el seminario de titulación para terminar la pinche carrera de Creación literaria. Estaba tenso porque tenía prometida la titulación y no quería defraudar a mis abuelos, básicamente, y a nadie en general. Las famosas materias arrastradas desde el 2002 eran de historia, según esto, pero más bien eran de política, y se han cambiado de nombre varias veces desde el mismo aňo, "Procesos sociohistóricos", no sé qué otro pinche nombre como ese y luego "Estudios sociales e históricos". Yo los llamaba clases de historia y había la parte I, la II, y la III. De huevísima la clase. Más aburrida que nada y las maestras más mediocres que nada. Digo, en general, difícilmente se encuentran personas verdaderamente buenas, brillantes, humildes, honradas, cultas, simpáticas, inteligentes, alegres y buena onda en las universidades de todo el mundo, pero en la UACM era un abuso mortal. Y eso que en sus argumentos principales para crearse era el de formar un concepto de ciclo superior inovador, relajado en la relación maestro alumno, y competitivo a nivel mundial, pero pus nomás no. En enero de 2009 hice otra vez los exámenes de historia I, II y III. Sólo pasé historia I, me da risa ahorita que escribo estas absurdidades. Y, bueno, en el próximo post seguiré con las razones que me orillaron a tomar una desición, ir a Sancris.

2 comentarios:

Love doctor dijo...

Nooooo, ya quiero sabeeeeeeeeeerrrrr.

amiga dijo...

y tu abuelo qué dice ahora q le has platicado?