domingo, noviembre 14, 2010

Diagnóstico de la sociedad checa: realmente mediocre

Estoy entendiendo a los checos, los encuentro atrapados en una época y en un mundo diferente al que estamos gran parte del resto del planeta. Los encuentro cagados y conmovedores. Los encuentro ridículos y absurdos. Los encuentro aburridos y sin personalidad. Los encuentro en extremo envidiosos, lastimeros, mediocres y pueblerinos. Los encuentro profundamente ignorantes mezlcado con una arrogancia infantil asquerosa.
Algunas cosas de esta sociedad pueblerina y atrasada: las checas tienen que tener a huevo un novio, pero novio, novio, con el que vivan, y si no viven con él, convencerlo hasta desquiciarlo para que vivan juntos, y lo atiendan como amas de casa de los años cincuenta, ya tengan dieciseis años o setenta años. No viven solas o con rumis, viven con sus papás o con sus novios. Sufren si no tienen novio y les da una envidia endemoniada los noviecitos que caminan juntos en las vías públicas. Son lastimeras hasta su puta madre, tratan de hacer sentir mal a la otra persona a como dé lugar y de manera estúpida y, a veces, hasta sicótica (esta impresión la obtuve no sólo por observar y escuchar a esta gente boba y mensa, también porque mi madre y mi abuela son completamente checas mal pederas y arrogantes a lo pendejo y sicótico). Si se les dice a las checas, ay, qué guapa o eres hermosa o qué bonita, te responden con un aire de conocedoras de mundo algo así como, de seguro se lo dices a todas. Las checas dicen cosas como, sí, está ahí, bailando con la señorita; tienen esta manera de hablar de hace cincuenta años, no pueden decir baila con esa chava o con esa chica o con esa vieja porque no es decente hablar de esa manera. No pueden salir con un güey o no tener güey y salir con varios cuates y ligarse a uno que otro por ahí y salir con varios y esas prácticas de las sociedades contemporáneas que comenzaron desde hace cincuenta años porque tampoco son decentes. Hay un chingo de checas que dicen: no, una mujer no puede ser directora de una empresa o una institución o un organismo porque simplemente es mujer y no tiene la capacidad. Encuentro a un rechingueral de Madames Bovarys, pero un megarechingueral. Luego también tienen un mal gusto generalizado impresionante que se manifiesta con la ropa, decoraciones en el hogar, restaurante o empresa, en el interior de sus autos, en todo.
Uy, y luego los pocos que saben algo de humanidades, artes y ciencias, intelectualidades en general, se creen, en fin, el humano parido por la vagina de oro, el ser más especial del mundo y son más mediocres y/o amateurs que no sé, los artistines, intelectualuchos, academicuchos y funcionariuchos que trabajan en el FONCA o hasta los que se encuentran en lugares de provincia en México donde hay muchas mentes muy estrechas y arrogantemente deslúcidas y prepotentes.
Si una persona ajena a esta sociedad no llegara a entender a este grupo de pueblerinos mediocres no vaya a pensar que sea porque tuviera algo complejo, mágico o especial, no, será simplemente porque no entiende el idioma.
En resumidas cuentas, Praga me caga cada vez más. Pinche Praga pueblerina y jodida de mente y de actitud.
Recomendaciones en general: leer Madame Bovary de Flaubert, ya sea por primera o por segunda vez, no les haría nada mal, y echarse toda la serie de Mad men desde el principio y detenidamente, apreciar cada detalle y cada cambio de los personajes y tratar de entender por qué el cambio, aunque esto les obligue a ver cada capítulo diez veces o las que sean necesarias.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Por que vives en Praga?
Yo que tu me iria, ya que no te gustan los checos y aun menos las checas. O es que eres masoquista?