Quiero un pedazo de chocolate. No, ahorita no. Mira. ¿Qué?, ¡óyeme, muchachito!, devuelve ese chocolate a su lugar ahora mismo. Me tengo que ir, ya se me está haciendo tarde, adiós. Ni creas que se me olvidará esto. Te quiero, muac. Sí, sí, toma. ¿Qué?, guau, ¿otro chocolate?, ¡gracias! Pero te lo comes aquí en mi presencia. Sí. ¿Sí?, ¿no que tenías prisa?, ¡me mentiste! Ay, no grites, no es necesario. ¡Me mentiste!, ¡no importa si grito o no! Ya no se puede ni jugar contigo. ¡Me mentiste!, ¡desgraciado, malhechor! ¿Malhechor?, ¿de dónde sacaste esa palabra?; seguramente del de aquí a lado, el general Santa Anna; por lo menos hubiera encarnado a uno más cuerdo. ¡Cállate, me mentiste! Ahora sí ya me voy; sí, hola, ¿Karla?; ah, perdón, enfermera, ¿usted cómo se llama?; okey, sí; ya me voy; todo bien, pero está un poco inestable; sí. ¡Mentiroso!, ¡todos son iguales, unos mentirosos! Adiós, muac. ¡No me toques!, ¡ya no quiero verte más! Hasta la próxima semana, adiós.
sábado, mayo 23, 2009
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2 comentarios:
Mi querido Guka el numero impreso se vende ahora en los puestos de periodico es el # 64. La portada es la que aparece en ese post.
¡Muchas felicidades por esas publicaciones!
Un abrazo fuerte.
e!
Hola Ruy, salu 2.
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