miércoles, julio 19, 2006

Pastelitos

Cada dos metros me encuentro un pedazo de mierda en la banqueta. Si valiera el dicho que al pisar mierda uno tiene buena suerte, pues en la escandón, donde vivo, seríamos los más suertudos del mundo. Pongo fotos de la evidencia en desechos caninos.
Ah, pero el otro día me encontré un boquete, un maldito cerro, de mierda humana. No le pude sacar foto, cuando regresé con mi cámara ya no estaba. Lástima, olía tan bien.









1 comentario:

lx dijo...

que imagenes tan placenteras...
me cago en la ostia, joder!